PODEMOS y la antigua obsesión por el CONTROL
Una Concesión es una forma administrativa de gestión que está contemplada en nuestro ordenamiento jurídico. De forma que, por ejemplo, un Ayto tiene la obligación de proporcionar agua potable a sus ciudadanos y puede hacerlo de varias formas, por ejemplo:
- A través de un servicio del propio Ayto, operando todo el proceso de principio a fin
- A través de una empresa municipal, con su Gerencia, su Consejo de Administración
- A través de una empresa privada, a la que se adjudica la concesión en determinadas condiciones de acuerdo al pliego de condiciones técnicas y administrativas
- etc
Por supuesto los ciudadanos abonan al concesionario el importe sengún tarifa.
Esta forma de gestión No es la única, además sus resultados no son absolutamente uniformes…en fin, por ello se han desarrollado otras formas y, normalmente, se emplean varias dentro del mismo Ayuntamiento.
La interacción de «lo público» y «lo privado» es rica, dado que esos mismos conceptos, aparte de la idea simplista que podamos tener, son muy matizables (por ejemplo: ¿Dónde colocar y cuales son los intereses de los políticos y la burocracia en «lo público»?)
Muchas personas han aportado elementos a considerar acerca de las formas de prestar un servicio público y/o realizar una actividad por parte de la Admon; a título de ejemplo, se incluye un resumen de un apartado del libro “La reinvención del Gobierno” (ISBN: 84-7509-986-6), de David Osborne y Ted Gaebler
- Creación de normativas legales y sanciones
- Normativa o liberación
- Control e investigación
- Licencias
- Política de impuestos
- Subvenciones
- Subsidios
- Préstamos
- Préstamos garantizados
- Contratar
- Franquicias
- Asociaciones público-privadas
- Asociaciones público-público.
- Corporaciones semipúblicas o privadas
- Empresa pública
- Adquisición
- Seguros
- Recompensas, premios y primas
- Cambiar la política de inversión pública
- Asistencia técnica
- Información
- Arbitrios
- Voluntarios
- Bonos
- Cuotas de impacto
- Catalizar esfuerzos no-gubernativos
- Convocar a líderes no-gubernamentales
- Amonestar
- Dinero-semilla
- Inversiones equitativas
- Asociaciones de voluntarios
- Coproducción o autoayuda
- Quid pro quo
- Gestión de la demanda.
- Venta, intercambio o uso de la propiedad.
- Reestructurar el mercado.
Estas opciones en «La reducción de la burocracia”, han sido, valga la redundancia, reducidas a las siguientes, y en el hipotético caso de que el Gobierno deba dirigir la actividad:
- Subcontratación
- Regulación de actividades del sector privado.
- Incentivos o desincentivos fiscales.
- Subvenciones a productores.
- Subvenciones a los consumidores.
- Políticas que permitan el uso de la propiedad pública.
- Riesgos compartidos.
- Información para los clientes.
- Asistencia técnica.
- Exigencia de gestión mediante tasas o impuestos.
- Persuasión.
- Catalización de la actividad voluntaria.
- Asociaciones público-privadas.
En esta tesitura organizativa, compleja, llegan algunos líderes de Podemos y se despachan con la típica «PEORA» disfrazada de mejora, en su intento de aglutinar votantes -de «izquierdas» o de «derechas»- que estén de acuerdo con la famosa máxima:
«Todo en el Estado, nada contra el Estado, nada fuera del Estado.»
En fin, le han respondido de esta forma, según mi criterio, bastante más inteligente, ponderada y libre, que propuesta de Podemos: